Los hermanos Conor y Dylan Donegan destacan en el circuito nacional gracias a sus buenos resultados en importantes eventos de surf
Tienen 17 y 14 años pero ya se han labrado un nombre en el surf nacional gracias a sus buenas actuaciones en importantes eventos que les ha llevado a estar en el punto de mira de prestigiosas marcas internacionales que ven en los dos hermanos a futuros campeones.
Conor y Dylan Donegan, de madre irlandesa y padre portugués, nacieron en Lanzarote y desde muy pequeños han tenido al mar como su mejor cancha de juego, no solo encima de una tabla de surf, sino con cualquier actividad que les mantuviese en contacto con este medio. Fue su padre el que se encargó de empujar la tabla para que pudieran surfear sus primeras olas en Famara y desde entonces se han ido forjando dos de los jóvenes riders más destacados de España en la actualidad.
Mi pasión por el surf viene desde que mi padre me enseñó de muy pequeño, fue a los dos años o incluso menos que me llevaba y me empujaba para coger las olas – Conor Donegan
“Mis amigos me decían de ir a jugar al fútbol y yo prefería ir a surfear” nos cuenta el mayor de los hermanos. Conor está entre los riders invitados para estar en la próxima edición del Quemao Class, una noticia que le hizo mucha ilusión. “Para mí en este evento es un sueño porque además de poder competir con alguno de mis ídolos, también considero que la ola del Quemao es la mejor del mundo.«
Conor ha participado en varios campeonatos logrando muy buenos resultados que han servido para ir ganando experiencia. Uno de sus secretos es “entrenar mucho el tipo de ola que me voy a encontrar en la competición” algo que le ha ayudado a subir en lo más alto del podio en muchos campeonatos.
Mi objetivo desde pequeño, desde que empecé a surfear ha sido llegar a profesional. A mí me gustaría verme ya luchando por entrar al CT que es la liga donde están los mejores. – Dylan Donegan
Dylan, al igual que su hermano, comenzó con apenas dos años a tener sus primeras sensaciones subido a una tabla de surf. El pequeño de los Donegan destaca que tiene una ventaja respecto a sus rivales y es que, su mejor arma es que vive en un lugar en el que pueden surfear los 365 días del año con una buena temperatura, con muchas horas de sol y con variedad de tipos de olas. Su objetivo a largo plazo es poder estar dentro del CT, un circuito internacional en el que solo participan los mejores riders del mundo.
“Sé que para llegar ahí tengo que entrenar mucho pero es lo que desde pequeño he visualizado y estoy trabajando cada día para conseguirlo”. Los resultados del pequeño de los Donegan no han pasado desapercibido y ya a día de hoy tiene contrato con la reconocida marca de surf Quiksilver, un apoyo que refleja el potencial que tiene el joven rider.
Lanzarote es el destino elegido por miles de surferos cada año para disfrutar de su deporte atraídos por el reconocimiento internacional que tienen algunos de los spot presentes en la isla. Conor y Dylan, sin saberlo, se han criado surfeando alguna de las mejores olas del mundo y es sin duda el gen de su pasión por este deporte.