El triatleta belga volvió a ganar el IRONMAN de Lanzarote el pasado sábado, en un lugar que considera su segundo hogar
La Isla volvió a ser un lugar mágico para el triatlón el pasado sábado con la celebración de la 32ª edición del Club La Santa IRONMAN Lanzarote. Este año, la prueba contó con cerca de 1.000 triatletas que, aunque con diferentes objetivos, buscaban todos cruzar la línea de meta antes del límite de 17 horas para obtener la medalla de finisher. El belga Kenneth Vandendriessche (08:29:54) y la alemana Anne Haug (09:06:40) fueron los primeros en cruzar la meta.
Puerto del Carmen volvió a ser el centro neurálgico de la prueba, con una gran infraestructura montada en Playa Grande, uno de los cambios más destacados de esta edición. La organización decidió trasladar la zona de transición a la playa para facilitar el acceso a los triatletas y mejorar la visibilidad de la meta para los espectadores, un acierto total aplaudido por participantes y aficionados.
La competición comenzó con máxima igualdad en el segmento de natación, en el que los triatletas tuvieron que recorrer 3.8 km en las tranquilas aguas de Puerto del Carmen, ofreciendo las primeras buenas sensaciones del día. En el tramo ciclista, los participantes atravesaron asombrosos paisajes de la Isla, como La Geria y el Mirador del Río, antes de regresar a Puerto del Carmen. Finalmente, llegó la maratón a pie, 42 km en los que los triatletas fueron impulsados por el aliento de cientos de aficionados, dando su último esfuerzo para alcanzar el objetivo.
Kenneth Vandendriessche se puso a la cabeza de la competición a 15 km de la meta. Esta fue su segunda victoria en esta prueba, después de tener que abandonarla el año pasado debido a una lesión, aunque se había coronado campeón en 2022. Vandendriessche comentó que hizo «la carrera perfecta. Tenía un plan antes de la carrera y lo seguí hasta el final«. El belga valoró positivamente el cambio de la zona de transición, diciendo que «es una gran mejora para la prueba; el ambiente en la zona de meta era increíble«. Para el triatleta, Lanzarote es un lugar ideal para el triatlón: «para mí, Lanzarote es la mejor isla para entrenar. Hay condiciones duras, subidas perfectas, buenas carreteras, y gente que respira y apoya el deporte«. Kenneth considera Lanzarote como su segundo hogar. «Conocí a mi esposa aquí, vivimos casi un año juntos en la isla, así que, para nosotros, este lugar es realmente especial«.
Anne Haug logró su primera victoria en el IRONMAN de Lanzarote, tras haber ganado tres veces el IRONMAN 70.3 en la Isla, aunque nunca había competido en este evento. La triatleta entrena durante largas temporadas en Lanzarote y conoce bien el desafío que supone ganar aquí. «La isla te lleva a tus límites físicos y mentales, y a veces más allá. Ayer jugué todas mis cartas y estoy súper agradecida de poder llevarme la cinta a casa«, comentó en sus redes sociales la actual subcampeona del Mundo IRONMAN.
El podio en la categoría masculina lo completaron los españoles Jordi Montraveta y Mikel Ugarte, segundo y tercero respectivamente. Por su parte, la francesa Jeanne Collonge y la británica Lydia Dant completaron el podio femenino del 32º Club La Santa IRONMAN Lanzarote.